preparador físico de la
intrigante pretemporada y del
original ciclo de Vitamina
Gracias al tendal de acalambrados contra Independiente volvimos a acordarnos de él.
De Ramiro muchos destacan su prolijidad a la hora de limpiar y guardar los conos anaranjados, el lustre de su cronómetro de marca japonesa, la impostada sonoridad de sus silbatazos, y el papel clave que desempeñó en la decisión de bajarle el pulgar al brasilero Fernando, proveniente de Real Arroyo Seco, a quien nos intentaron encajar, seguramente como parte de la operación inmobiliaria.
El Prof. Loguercio, alejado momentáneamente del fútbol, espera ansioso la llegada del verano para poder volver a trabajar. Esta vez, en la colonia de vacaciones del Club Amigos de la Gomera, de Villa Insuperable.
No le gusta que lo llamen "Profe". Prefiere "Licenciado".
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